martes, 30 de enero de 2018

Domingo 28 de enero de 2018 (Volviendo al invierno)



Parece que “ha vuelto” el invierno después del estupenda jornada del domingo pasado, amaneciendo hoy un día bastante más frío, motivado por un viento del norte que nos acompañó durante toda la jornada.
Continuando con la media habitual de asistentes a las salidas del Club en lo que llevamos de invierno (4-5), en esta ocasión nos hemos reunido un quinteto compuesto por Eltiolavara, Transcastro, Horacio, Rafa y Edu, al que llevábamos mucho tiempo “sin ver el pelo”.
Como para combatir el frío matinal había que “tirar p’arriba”, decidimos hacer una rutilla para dirigirnos hacia el mirador del Embalse de San Juan situado en la orilla opuesta de Pelayos, desde donde contemplar el nivel bajísimo de agua que tiene actualmente del embalse.
Y así comenzamos a rodar abandonando la Plaza Mayor por la Avenida de la Constitución para cruzar la carretera M-507 y tras pasar junto a las instalaciones de la piscina municipal desviarnos a la derecha para dirigirnos hacia el depósito del agua.
Comenzamos con las “patas frías” a subir la cuesta hacia los depósitos del agua, dejándolos a nuestra derecha para continuar subiendo por el senderito conocido como “el reguero”, y donde a excepción de un único tramo más técnico de piedras donde en esta ocasión tuvimos que poner todos “pie a tierra”, realizamos toda la subida sin complicaciones
El sendero nos llevó a enlazar con el camino de Villa del Prado a Pelayos, donde hicimos una breve parada de reagrupamiento para juntarnos y desde allí continuar el ascenso por el camino todos juntos aunque con Transcastro y Horacio un pelín rezagados “regulando en la subida”.
Tras reagruparnos de nuevo en el alto en la ladera del Cerro Rojo, abandonamos el camino para incorporarnos a un cortafuegos en paralelo al mismo por el que descendimos hasta la Cañada de Talavera llegando junto a la laguna del arroyo de Las Labores, desde donde continuamos la marcha por la Cañada para ascender hacia una torreta de vigilancia de incendios y desde allí descender por la “Loma de las Labores” hasta llegar a las cercanías de la carretera M-501.
Desde allí rodamos en paralelo a la carretera para a continuación bordear el cerro del Cubo y llegar hasta el comienzo de la vía verde de Picadas, haciendo una parada junto a las aguas del embalse además de una fotito junto a los cañaverales.
Tras unos minutillos reanudamos la marcha y pasamos bajo el puente de la carretera M-501 para incorporarnos a la misma unos metros hasta llegar al mesón “El Puerto”, donde tomamos un cortafuegos paralelo a la carretera por el que enlazamos con el camino que recorre la margen derecha del embalse donde tras una subida de unos dos kilómetros llegamos hasta el mirador objeto de nuestra ruta.
Y allí con las vistas del embalse realizamos la “parada barrita” de la jornada, con la sorpresa de que apareció de repente nuestro amigo Paquito, al que hacía mucho tiempo que no veíamos y que ya se quedó con nosotros el resto de la ruta.
Tras reponer fuerzas y hacer las fotitos oportunas reanudamos la marcha rehaciendo el camino hasta el mesón, donde cruzamos la carretera para internarnos en la “mini urbanización” de San Juan, desde donde tomamos un camino que asciende por la ladera del cerro del mismo nombre para “ponernos a tono” haciendo frente a una subida corta pero intensa con algunos tramos del 19% y el 23%, que nos hizo “entrar de nuevo en calor”.
Pasamos por la urbanización “Cerro de San Juan” y nos incorporamos al camino de Bajondillo, por el que llegamos hasta la carretera que comunica Navas del Rey con la urbanización “El Morro”, llegando hasta esta última para descender a continuación hasta el embalse de Picadas.
Proseguimos la marcha por la vía verde de Picadas, con Eltiolavara “de avanzadilla a toda leche” mientras el resto del grupo se lo tomaba más tranquilamente hasta llegar al muro de la presa, pasando sobre el mismo y continuando después con la subida por la carretera hasta parar en el alto, donde una vez reagrupados reanudamos la marcha bajando por la carretera hasta desviarnos a la derecha para tomar el camino que va por detrás del Safari-Park y que nos llevó a salir a la carretera M-507 a la altura de El Rececho, donde cruzamos la misma para incorporarnos después al antiguo trazado del ferrocarril Madrid-Almorox, donde por una vez…..¡¡El aire nos daba “de culo”!!.
Y así regresamos al pueblo tras hacer una rutilla de unos 44 kilómetros con “ambiente fresco” debido al viento del norte que nos ha acompañado durante toda la jornada, estando de vuelta a eso de la una de la tarde. 

1 comentario:

  1. Mis 2 webs (sin publicidad) pueden interesar a ustedes: yofrenoelcambioclimatico.blogspot.com (MENOS es MEJOR) y plantararboles.blogspot.com, un manual para reforestar, casi sobre la marcha, sembrando semillas de árboles autóctonos en zonas deforestadas, baldías, más o menos cercanas al lugar de su recolección. Salud, José Luis Sáez

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