viernes, 28 de abril de 2023

Vídeo de la ruta del Club MTB Villa del Prado por la Sierra de Cazorla


 

Domingo 23 de abril de 2023 (De ruta por la Sierra de Cazorla)

 Después de varios años sin hacerlo, por fin hemos vuelto a organizar un viaje de fin de semana a algún sitio “lejano”, siendo en esta ocasión el lugar elegido la Sierra de Cazorla en Jaén y la zona del río Borosa.

Para este viaje nos dimos cita el sábado por la mañana a las once Eltiolavara, Alberto, David, Juan Carlos, Roberto y Rafa, para tras apañar las bicis en la furgoneta emprender el camino hacia la Sierra de Cazorla, donde llegamos por la tarde tras haber hecho una paradita en el camino para comer tranquilamente.

Para aprovechar la tarde, nuestro compi Alberto (Organizador y guía durante el finde) nos había preparado una preciosa ruta de senderismo llamada “La Cerrada de Elías”, que es un sendero junto al río Borosa que transcurre por un cañón boscoso y con varios puentes de madera por el que nos dimos un buen “paseíto” de unos diez kilómetros que nos sirvió para abrirnos el apetito para la cena.

Tras una buena cena en el hotel, nos fuimos a dormir para reponer fuerzas para lo que nos esperaba para el siguiente día, habiendo quedado a las siete y media para desayunar y poder comenzar la ruta prontito.

Y a las siete y media nos dimos cita en la cafetería del hotel, donde cogimos energías para posteriormente coger los vehículos y dirigirnos hacia el punto de inicio de la ruta, un parking junto una piscifactoría de truchas donde con bastante fresquito (4 grados de temperatura) nos preparamos y adecuamos las bicis para comenzar a rodar cerca de las ocho y veinte de la mañana.

Tras algo más de dos kilómetros rodando junto al río Borosa, nos desviamos a la derecha para pasar una barrera y comenzar ya a ascender por una pista por la que faldeando el Valle de Roblehondo llegamos hasta el Poyo del Calvario, para descender a continuación hasta el Área recreativa de Linarejos, comenzando a continuación otro ascenso por la Loma de la Sarga que nos llevó a un mirador desde donde disfrutar de unas bonitas vistas de los “Poyos de la Mesa”, una altiplanicie con unos impresionantes tajos.

Continuamos la ruta  ascendiendo y recorriendo pistas forestales disfrutando de bonitas vistas como en el “Estrecho de los Perales y nos incorporamos posteriormente al camino de Poyo Mangullo para llegar al collado de la Fuente Bermeja y comenzar desde allí a descender hasta la Laguna de Valdeazores.

Pasamos junto a la laguna y por un sendero en el que en ocasiones tuvimos que bajar de la bici llegamos hasta el embalse de los Órganos, desde donde a continuación comenzaría un buen tramo de “senderismo” pasando por un par de túneles excavados en la roca en la ladera del “Picón del Haza de Abajo” en los que tuvimos que hacer “malabares” para pasar las bicis.

Tras pasar los túneles, continuamos disfrutando de unas bonitas vistas para después descender hasta los pies de la cascada llamada “El Salto de los Órganos”, donde claro está que nos hicimos una fotito.

Continuamos después descendiendo por un tramo “complicadete” donde en gran cantidad de ocasiones tuvimos que echar pie a tierra al ser casi imposible permanecer sobre la bicicleta debido a tanta piedra que había, además de dejar sorprendidos a todos los senderistas que se quedaban extrañados de vernos bajar en bici.

Tras conseguir llegar a la central eléctrica, tomamos por fin una pista por la que descendimos a buen ritmo rodando junto al cauce del río Borosa hasta regresar al parking desde donde habíamos iniciado la ruta.

Una ruta preciosa pero a la vez exigente, ya que hemos hecho unos 65 kilómetros y llegado casi a 1.700 metros de desnivel acumulado, uniéndose también el calorcito que hacía en la parte final de la ruta.

Y tras terminar la ruta, echamos las bicis a la furgoneta y nos dirigimos hacia el hotel para tomarnos una cervecita fresca y reponer fuerzas antes de ducharnos y emprender el camino de vuelta a casa tras haber pasado un gran finde.


lunes, 10 de abril de 2023

Domingo 9 de abril de 2023 (De visita a la Peña de Cenicientos)

 Aunque a primera hora hacía algo de fresquito, la previsión para la jornada de hoy era de cerca de treinta grados, y para darle al pedal en esta jornada de “pri-verano” nos hemos reunido en esta ocasión un buen grupito compuesto por Eltiolavara, David, Alberto, César, Gabriel, Juan Carlos, Roberto y Rafa.

Como habíamos hablado hacía un par de semanas, teníamos pendiente enseñar a Juan Carlos un bonito sendero de bajada desde la Peña de Cenicientos, para lo que minutos después de las nueve echamos a rodar atravesando el pueblo para dirigirnos hacia el Polígono Industrial y desde allí comenzar a ascender por un sendero entre las encinas por la ladera del cerro Crespo para continuar después ascendiendo hacia El Encinar del Alberche.

Tras entrar en calor al hacer en pocos kilómetros un buen desnivel, llegamos hasta la urbanización de El Encinar del Alberche, la cual atravesamos para llegar a la parte de arriba de la urbanización, en el cerro de Pino Romero, y descender posteriormente por la pista hormigonada hasta la carretera N-403, la cual atravesamos para incorporarnos a la Cañada de Talavera.

Rodamos unos metros por la Cañada y nos desviamos a la derecha para tomar el camino del Pajar del Mudo y poner rumbo hacia Cadalso de los Vidrios, recorriendo un nuevo sendero por la zona del Cerro de Mingo Chico que habíamos descubierto recientemente y por el que llegamos hasta la carretera M-507, la cual cruzamos para continuar por otro senderito por el que llegamos hasta el pueblo de Cadalso de los Vidrios.

Atravesamos Cadalso y nos incorporamos a la carretera M-541 con dirección a Cenicientos, por la que rodamos unos tres kilómetros y medio hasta desviarnos a la izquierda para comenzar con la subida a la Peña de Cenicientos, unos tres kilómetros con pendientes del 10%-15%-19% en los que hay que “saber sufrir”.

Tras un gran esfuerzo llegamos a la cima, realizando la última parte de la subida hasta la cima únicamente Eltiolavara, Juan Carlos, Roberto, David y Rafa, mientras el resto consideraron que ya habían tenido bastante subida.

Después de reponer fuerzas y que el grupo de la cima descendiera, nos dispusimos a afrontar el divertido descenso por el sendero, en el que hubo algunos “sustos” (que se lo digan a David) ya que al estar el terreno muy seco las ruedas no tenían mucho agarre y había que tener precaución.

Terminamos el descenso junto a la carretera M-545, la cual tomamos durante unos metros hasta llegar a Cenicientos, donde hicimos una paradita en un parque a la entrada del pueblo para reponer agua para después continuar atravesando el pueblo y tomar durante unos metros la carretera M-544 hasta desviarnos a la izquierda por el Camino de Villa del Prado, que posteriormente dejamos al tomar un sendero a nuestra izquierda por el que realizamos un divertido descenso que nos condujo hasta la carretera M-542, por la que rodamos algo menos de un kilómetro hasta desviarnos a nuestra derecha para tomar una pista hormigonada que conduce hasta las canteras y que posteriormente abandonamos para enlazar con la Cañada de Talavera.

Rodamos entonces por la Cañada de Talavera para dirigirnos hacia la urbanización El Romillo y cruzar la carretera N-403 para a continuación ascender por la pista hormigonada que habíamos descendido anteriormente hasta llegar de nuevo a El Encinar del Alberche.

Al igual que en ocasiones anteriores cuando hemos ido hasta la Peña de Cenicientos, como se nos había hecho “un poco tarde” decidimos bajar al pueblo por la carretera, por lo que atravesamos la urbanización para incorporarnos a la carretera M-507 y realizar los últimos kilómetros hasta regresar al pueblo.

En una gran jornada casi de verano, hemos realizado una buena ruta de unos 45 kilómetros con cerca de 1.300 metros de desnivel acumulado, dándonos un buen “tute”, y es que la visita a la Peña de Cenicientos………..¡¡Siempre merece la pena!!.

 


lunes, 3 de abril de 2023

Domingo 2 de abril de 2023 (Visitando el cerro de Cuerda Verduguera)

 En esta ocasión el día ha amanecido con algo de viento, lo que hacía que la sensación a primera hora fuera de “fresquete”, lo que no ha impedido que en la Plaza Mayor a la hora de siempre nos juntáramos los “fijos” Eltiolavara, Alberto, David, Gabri, Horacio y Rafa.

Como hacía mucho tiempo que no lo visitábamos, decidimos poner rumbo hacia “la antena de Robledo” (aunque en realidad está en el término de San Martín de Valdeiglesias, sobre el cerro de “Cuerda Verduguera”), así que minutos después de las nueve comenzamos nuestra ruta abandonando el pueblo por el antiguo trazado del ferrocarril Madrid-Almorox para tras recorrer unos tres kilómetros desviarnos a la izquierda por un camino por el que llegamos hasta la carretera M-507, la cual atravesamos para continuar por el camino del Molino de los Rodeles y pasar por detrás del Safari Park hasta enlazar con la carretera de Picadas, donde nos encontramos con nuestro amigo David y dos compañeros, que decidieron unirse al grupo.

Nos dirigimos entonces hacia el embalse de Picadas, recorriendo la vía verde hasta el final y tomando durante unos metros la carretera M-501 hasta llegar a la altura del Mesón El Puerto, donde atravesamos la misma para comenzar a ascender hacia la Cuerda de La Parada con un primer tramo durillo hormigonado y el resto pista donde sin grandes porcentajes tocaba subir….. y subir.

Después una subida de unos seis kilómetros, nos reagrupamos todos unos metros antes de tomar el desvío a la derecha para descender unos metros antes de continuar ascendiendo por la ladera del cerro Cuerda Verduguera, ésta vez si que con alguna rampa más durilla.

Llegamos junto a la barrera y allí hicimos la “parada barrita” además de la foto de grupo de la jornada mientras disfrutábamos de unas bonitas vistas para posteriormente emprender el rápido y vertiginoso descenso por la pista asfaltada que nos llevó hasta la carretera M-512, a la que nos incorporamos para descender durante un kilómetro hasta llegar a la carretera M-501, que como siempre, al tener mucho tráfico tuvimos que esperar un tiempo para poder cruzar de manera prudente.

Tras cruzar la carretera, tocaba un cortito pero intenso tramo de subida por la zona de Las Carboneras para continuar subiendo por un senderito hasta la antena que hay sobre el cerro del Monje y descender por otro senderito hasta el pueblo de Navas del Rey.

Nos dirigimos hacia la plaza del pueblo para “reponer agua” y a continuación tomamos la carretera que va hacia la urbanización “El Morro” para desde allí descender hasta el embalse de Picadas, donde continuamos la marcha a buen ritmo recorriendo el bonito entorno de la vía verde hasta llegar a la presa, pasando sobre el muro y continuando con el ascenso por la carretera y posterior descenso hasta enlazar con el camino que transcurre del detrás del Safari Park hasta enlazar con el camino del Molino de Rodeles, por el que llegamos junto a la carretera M-507 a la altura de El Rececho.

“Volviendo sobre nuestras rodadas” del comienzo de la ruta, cruzamos la carretera y enlazamos con el antiguo trazado del ferrocarril Madrid-Almorox para regresar al pueblo tras hacernos una buena rutilla de unos 57 kilómetros en la que a pesar de que en algunos tramos nos ha acompañado algo de viento, hemos disfrutado de una agradable temperatura primaveral.