Para la jornada de hoy teníamos planificada una de nuestras “rutas
mensuales”, siendo en esta ocasión nuestro objetivo el llamado “Camino del
Ingeniero”, un precioso sendero que recorre la cara norte de la Sierra de Malagón
que ya recorrimos hace ocho años y donde no habíamos vuelto desde entonces.
A las siete y cuarto de la mañana habíamos quedado en la estación de
autobuses un grupito compuesto por Eltiolavara, Transcastro, Alberto, Jorge,
César, Senderitos y Rafa, cargando las bicis en el camión de Transcastro cuando
estuvimos todos y para a continuación poner rumbo hacia la localidad abulense
de Peguerinos, punto de inicio de la ruta.
Tras poco más de 60 kilómetros llegamos a Peguerinos sobre las ocho y media
de la mañana, realizando los preparativos oportunos en las burras y en “nuestra
indumentaria” para a continuación echar a rodar.
Comenzamos la ruta atravesando el pueblo e incorporándonos a una carretera
por la que ascendimos unos cuatro kilómetros hasta llegar a las cercanías del
“Camping de Valle En medio”, donde una vez que ya habíamos calentado las
piernas comenzaba “lo bonito”, es decir, los senderos.
Y desde allí comenzamos a ascender entre pinos y helechos por senderos
técnicos aunque sin mucha dificultad con dirección hacia el “Collado de la
Gargantilla”, para desde allí encaminarnos hacia el punto de las “Tres
Provincias”, donde coinciden los límites de provincia de Ávila, Segovia y
Madrid, y donde unos metros más adelante comienza el “Camino del Ingeniero”.
Comenzamos entonces a disfrutar los doce kilómetros de senderos zigzagueando
entre pinos y helechos, con tramos de subidas y tramos de bajadas donde
disfrutamos como niños en un entorno espectacular para la bici de montaña.
Descendimos a continuación hasta las cercanías de San Rafael, para afrontar
a continuación la parte más “durilla” de la jornada, es decir, el ascenso hasta
el “Collado del Hornillo”, primero por un sendero llamado la “Senda de Peña
Águila”, que con alguna buena rampa donde alguno tuvo que poner pie a tierra nos
condujo hasta un mirador con el mismo nombre donde hicimos una “parada barrita”
para disfrutar de las vistas antes de continuar por una pista y llegar al “Collado
del Hornillo” tras un ascenso de unos cinco kilómetros desde San Rafael.
Tras una breve paradita para “recuperar el aliento”, de nuevo tocaba disfrutar
bajando, para lo que nos incorporamos a la senda del Collado del Hornillo, un
sendero que transcurre en paralelo al arroyo del mismo nombre y por el que
descendimos unos cinco kilómetros, enlazando a continuación con una trialera
por la que llegamos hasta el embalse de “La Aceña”, que dicho sea de paso, se
encontraba en un estado…………..
Desde el embalse ya únicamente nos quedaba recorrer un par de kilómetros
para ascender hasta el pueblo de Peguerinos y regresar donde habíamos dejado
los vehículos y donde como es habitual nos esperaba un avituallamiento líquido
y sólido para reponer las energías gastadas durante la ruta.
Y que podemos decir de la ruta………..!!!!!!!. Simplemente ESPECTACULAR, un
recorrido de unos 46 kilómetros con aproximadamente el 80% de la ruta por
senderos, lo que la convierten en probablemente la ruta más bonita que hayamos
hecho hasta la fecha en nuestras excursiones.
Además hemos tenido durante toda la mañana una temperatura increíble, sin
tener en ningún momento sensación ni de frío ni de calor, y transcurriendo
prácticamente toda la ruta a la sombra de los pinos.
Tras reponer fuerzas, “levantamos el campamento” y pusimos rumbo de regreso
al pueblo, encantados con el RUTÓN que habíamos realizado y teniendo claro que
no vamos a dejar pasar tanto tiempo hasta una nueva visita al “Camino del
Ingeniero”.