martes, 29 de diciembre de 2015

Domingo 27 de diciembre de 2015 (Última rutilla del año)

Bueno………..¡¡¡¡como se notan las fiestas y las vacaciones!!!!
A las 9:15 partimos desde la Plaza Mayor un trío compuesto por dos miembros del Club, Horacio y Eltiolavara, acompañados además de nuestro amigo Alberto “el SAPERO”.
Con idea de rodar un poquito y haciendo frente al frío mañanero tomamos el antiguo trazado del ferrocarril con la idea de ir hacia Almorox, donde llegamos a la Plaza  del pueblo después de pedalear a buen ritmillo.
Tras retomar aire, comenzamos la parte divertida del día cogiendo la calzada con dirección a Cadalso y al llegar a un viejo puente que está en desuso cogemos el camino de la izquierda que según preguntamos a un lugareño nos dijo que no llevaba hasta a la Cañada de Talavera y continuamos por un bonito camino exigente en subida para al llegar a la Cañada, donde paramos para repostar energías y hacernos una fotito.
Retomamos la marcha poniendo dirección Villa del Prado con la idea de encontrar un sendero que nos cambiara de Valle para poder visitar Canto Ceñido, donde llegamos sin mucho problema y descubriendo un precioso sendero inédito.
Tras llegar a sus pies haciendo “el cabra por la ladera” nos hicimos otra fotito de recuerdo del lugar y reemprendimos la marcha teniendo Javi una pequeña avería con la rotura de un radio de la rueda trasera (Claro, la potencia sin control……….. ¡¡ya se sabe!!”.
Después de “conejear” un poquito salimos al camino ya en bajada que nos lleva hasta El Romillo y cruzando la carretera subimos por la pista de hormigón con dirección hacia El Encinar del Alberche, para al llegar a la puerta de la urbanización girar a la derecha para bordear la urbanización por el cortafuegos.
Llegamos hasta el camino del Majanal, donde tomamos un sendero por el que descendimos hasta llegar a una laguna que ahora se encuentra seca, bordeándola y continuando hasta llegar de nuevo al antiguo trazado del ferrocarril, por el que rodando en sentido inverso al que habíamos comenzado la ruta regresamos a Villa del Prado llegando aproximadamente sobre la una, tras realizar una rutilla de unos 45 kilómetros con un día fabuloso y la sensación de habernos divertido muchísimo disfrutando en buena compañía y de “un día primaveral en invierno”.


lunes, 21 de diciembre de 2015

Domingo 20 de diciembre de 2015 (De ruta "pre-Navideña")



Domingo electoral y el día ha amanecido algo menos fresquito que el domingo anterior, reuniéndonos en la Plaza Mayor a la hora de siempre un grupito compuesto por Eltiolavara, Horacio, Noesperoanadie, Perejil, Senderitos y Rafa, uniéndose a nosotros Paco "el Máquina".
Mientras esperábamos los "minutos de cortesía" por si venía algún rezagado debatiendo sobre donde encaminar nuestras pedaladas pensando una ruta "sencillita" para Senderitos, al "interesado" no se le ocurrió otra cosa que "echar un órdago" y decir que para entrar en calor.....¡¡Al alto de la Mira!!.
Eltiolavara aceptó el órdago y los demás, que pensábamos en una ruta tranquilita con el objetivo de estar pronto de vuelta para tomar una "cervecita navideña" ya nos imaginábamos que "se jodió la ruta light".
Y comenzamos a pedalear saliendo del pueblo por el antiguo camino de San Martín de Valdeiglesias a Villa del Prado, donde coincidimos con un grupillo de los "Caracoles".
Realizamos la subida cada uno a su ritmillo llegando al alto bastante escalonados, y una vez que estuvimos todos, después unos minutillos de relax reanudamos nuestro camino despidiéndonos de "los Caracoles", que se quedaban aún esperando a que llegara Dani hasta el alto.
Continuamos la marcha llegando hacia la Cañada de Talavera y cruzando la misma para continuar con dirección a San Martín de Valdeiglesias por el camino-cortafuegos hasta llegar a la explanada donde enlazamos con el camino-cortafuegos de "La Fuenfría", lugar de comienzo de la parte "heavy" de la ruta con el inicio de la ascensión al alto de la Mira, punto más alto de la zona con sus 1.038 metros de altitud.
Así que "colocando el molinillo" nos liamos a ascender por un primer tramo de cortafuego que transcurre por la cara suroeste, siendo este primer tramo la zona "light" de la subida, llegando a un alto donde de continuar por el camino de la Fuenfria bajaríamos hasta la Cañada de Talavera y donde nosotros abandonamos el mencionado camino desviándonos a la izquierda para ahora sí, afrontar el tramo "heavy", con un subidón por el cortafuegos donde unos más que otros pero todos tuvimos que poner pie a tierra en algún momento.
Después de algunos metros de "empuja-bike" conseguimos coronar nuestro objetivo, y allí en la cima junto al vértice geodésico hicimos la "parada barrita" de la jornada, además de la fotito de grupo.
Tras los minutillos de relax, llegó el momento de reanudar la marcha y comenzar el descenso hacia el cerro Valdenoches, para lo que tomamos un primer tramo de trialera con bastante piedra saliendo a continuación al cortafuegos que baja desde la cima y por el que descendimos sin problemas hasta la explanada previa al cerro de Valdenoches.
Esperamos unos minutillos a que llegara Paco (las bajadas no son lo suyo) y comenzamos el ascenso al cerro Valdenoches por la pista de piedra suelta que lleva hacia la antenas que hay en su cima, donde para realizar el siguiente descenso el grupo se dividió en dos, por un lado Perejil, Senderitos y Paco, que querían una bajada más "light" y bajaron por el cortafuegos, y por otro Eltiolavara, Noesperoanadie, Horacio y Rafa, que eligieron la bajada por un sendero que recorre la ladera del cerro Valdenoches coincidiendo con el tendido eléctrico.
Después de un primer tramo de bajada por el sendero, nos reagrupamos todos en el camino de la casa de los forestales, donde todos juntos continuamos por la "segunda parte" del sendero que nos llevó a salir a un cortafuegos que baja desde el cerro de las Mucas.
Tras subir unos metros por el cortafuegos, nos desviamos a la izquierda para tomar la "Senda de Cadalso", un senderito entre las encinas por el que hacía mucho tiempo que no bajábamos y que por la vegetación que ha crecido se nota que últimamente no ha tenido mucha actividad.
Así finalizaba la "parte complicada" de la ruta, continuando después por un caminito entre los pinos por el que llegamos hasta las cercanías de la carretera M-501, donde tomamos un sendero en paralelo a la carretera por el que llegamos hasta el pinar del arroyo de las Labores, continuando de nuevo en paralelo a la carretera hasta llegar al Cerro del Cubo, bordeándolo por el senderito hasta llegar a la depuradora de Pelayos.
Enlazamos allí con la vía verde de Picadas, donde comenzamos a ritmo tranquilo hasta que "los gorditos" Senderitos y Noesperoanadie, pusieron un ritmo infernal hasta llegar a la presa, partiendo el grupo en unidades sueltas.
Nos reagrupamos todos sobre el muro de la presa, para continuar después con el ascenso y posterior descenso por la carretera hasta desviarnos a la derecha para tomar el camino de detrás del Safari Park, por el que continuamos hasta llegar a la carretera M-507 a la altura de "El Rececho", donde cruzamos la misma para enlazar con el antiguo trazado del ferrocarril Madrid-Almorox y realizar los últimos kilómetros hasta llegar al pueblo, de nuevo con "un buen pique entre los gorditos".
Y así terminamos una rutilla cortita, de unos 35 kilómetros pero intensa en subidas y bajadas, con unos primeros 14 kilómetros mas "heavys" y una segunda parte mas "light" en una jornada que poco a poco se fue nublando pero sin llegar a llover ni una gota y en la que cumplimos nuestro objetivo de estar de vuelta a una hora "prudencial" para tomarnos una "cervecita navideña" y fomentar así las "relaciones sociales", parte importante de todo grupo.
Felices Fiestas a todos!!!



lunes, 14 de diciembre de 2015

Domingo 13 de diciembre de 2016 (de ruta con "dos novatos)



Continúa la climatología "respetándonos" para las alturas del año que estamos, ya que aunque hace bastante fresquito y a primera hora los dedos de las manos sufren los rigores del invierno, por suerte de momento no caen "esas pelonas" propias de estas fechas.
Dispuestos a disfrutar de una nueva jornada de bici, nos hemos reunido en la Plaza Mayor a la hora de siempre un buen grupito compuesto por Eltiolavara, Transcastro, Jose, Horacio, Rafa, Senderitos (que como el turrón ha vuelto a casa por navidad), David (reapareciendo tras diez meses desde sus últimas pedaladas) y Alberto, un amigo de Villamanta que nos acompaña en algunas de nuestras rutas.
Para hacer "más llevadero" el retorno a Senderitos y David, planificamos una rutilla sin demasiadas exigencias, para lo cual en vez de empezar como es habitual en estas fechas tirando "p'arriba", abandonamos el pueblo por el antiguo trazado del ferrocarril Madrid-Almorox cruzando la pista asfaltada que va hacia la ermita de La Poveda para continuar por el trazado del ferrocarril atravesando la finca "El Rincón" hasta salir al camino de La Poveda, donde giramos a nuestra izquierda para dirigirnos hacia la carretera M-507.
Al llegar junto a la carretera, nos incorporamos a ésta hasta llegar hasta el puente de "La Pedrera", notando una buena bajada de la temperatura, ya que por la velocidad y el frío se llegaba a sentir dolor en la cara.
Pasamos sobre el puente y nos incorporamos al camino que discurre en paralelo al río para bordear Aldea del Fresno y salir a la carretera M-510, que recorrimos durante unos metros hasta tomar a nuestra derecha la vía pecuaria con dirección a Chapinería, afrontando así el primer y único tramo "calefactor" de la jornada, realizando el ascenso hasta Chapinería a ritmo tranquilo pero lo suficiente como para entrar en calor.
Al poco de entrar en Chapinería nos desviamos a la izquierda para tomar un bonito sendero por el que descendimos hasta la carretera M-510, cruzando la misma para continuar por un precioso tramo de senderos y senderos entre encinas hasta enlazar con el camino de Socaancho, por el que llegamos hasta la conducción Picadas-Valmayor.
Giramos a nuestra izquierda y comenzamos a rodar por el sendero que transcurre sobre la conducción hasta un punto donde al solecito hicimos la "parada barrita" de la jornada, además de una de las fotitos de grupo.
Tras los minutos de relax, reanudamos la marcha abandonando la conducción para tomar un sendero entre los tomillos por el que descendimos hasta el camino rural del Valle, por el que rodamos unos metros hasta desviarnos a la izquierda para realizar una corta ascensión y posterior descenso hasta la carretera que comunica Navas del Rey con la urbanización "El Morro".
Tras unos metros por la carretera, nos desviamos a la derecha para tomar el camino de Bajondillo, por el que con parada intermedia para arreglar un pinchazo de Jose (últimamente está "en racha"), llegamos hasta la torre de hormigón de la conducción Picadas Valmayor que hay sobre el cerro de San Juan, donde de nuevo hicimos una paradita de relax y fotitos.
Reanudamos la marcha con un vertiginoso descenso por un cortafuegos por el que llegamos hasta la orilla el embalse de Picadas, cruzando después la carretera M-501 para pasar por debajo del puente sobre el embalse y tomar un senderito junto al agua evitando así el peligroso desvío desde la carretera.
Tras una nueva fotito junto al agua del embalse, continuamos pedaleando por un senderito entre zarzas hasta salir al inicio de la vía verde de Picadas, donde pusimos rumbo a la presa partiéndose el grupo en dos, de una parte los que tenían "mas prisa", y por otra un trío compuesto por Eltiolavara, Rafa y David, que ya acusaba en las piernas los kilómetros recorridos.
Llegamos hasta la presa y realizamos el ascenso por la carretera y posterior descenso hasta desviarnos para tomar el camino de detrás del Safari, donde Rafa se dió un buen "piño", aunque por suerte sin consecuencias.
Unos moteros que nos encontramos nos dijeron que el camino estaba cortado por una montería, con lo que tuvimos que cambiar de intenciones y retroceder sobre nuestros pasos para tomar la carretera de Picadas hasta llegar a la carretera M-507 y poder enlazar de nuevo con el camino de La Poveda por el que rodamos hasta llegar a la ermita.
Rodando por la pista asfaltada a ritmo tranquilo enlazamos con el antiguo trazado del ferrocarril Madrid-Almorox, por el que regresamos al pueblo pedaleando en sentido inverso a como habíamos empezado la ruta.
Aunque la mañana comenzó fresquita, conforme avanzaba desaparecieron las nubes y se quedó una mañana soleada en la que hemos hecho una bonita ruta de cerca de 55 kilómetros, en la que "los novatos" Senderitos y David han dado la talla después de tanto tiempo sin darle al pedal.


lunes, 30 de noviembre de 2015

Domingo 29 de noviembre de 2015 (Primera helada del invierno)



Ha amanecido el domingo con la primera helada del invierno por tierras de Villa del Prado, lo que ha hecho que los valientes que nos hemos juntado en la Plaza Mayor a la hora de siempre tuviéramos que "tirar de" gorros, bragas (de cuello), pasamontañas, etc. para protegernos del fresquito reinante. Aún así, nos hemos reunido un "sexteto" compuesto por Eltiolavara, Noesperoanadie, Transcastro, Jose, Edu y Rafa.
Como "la rasca" que hacía era considerable, había que entrar pronto en calor, por lo que necesitábamos pronto unas cuestecitas. Ya que últimamente siempre "tirábamos p'arriba", en esta ocasión hemos variado y tomando rumbo suroeste abandonamos el pueblo por el camino del Valle, haciendo frente a un par de cuestecillas.
En vez de bajar hacia el arroyo Arrofresnos, en el alto giramos a la derecha para continuar ascendiendo hasta coronar el cerro Crespo, bajando a continuación (ésta vez sí) hacia el arroyo, junto al que rodamos en paralelo durante unos metros hasta desviarnos a la derecha para afrontar un buen cuestón en forma de sendero entre las jaras para continuar "calentando".
Y por si alguno todavía "tenía frío", tras el cuestón nos desviamos a la izquierda para después de unos metros de descenso afrontar un par de tramos "heavy", con unas rampas cortas pero de casi el 20% de desnivel.
Con "la caldera" a tope, llegamos al camino del Majanal, donde a algunos "se despojaron" de braga y gorros, que ya les sobraban después de los cuestones, para continuar ascendiendo hasta las cercanías de la urbanización de El Encinar del Alberche.
Tras reagruparnos, comenzamos a descender algo más de dos kilómetros por el camino que va hacia la urbanización de Las Hoyas, para después desviarnos a la derecha hacia las "Casas de Valdeolivas".
Cruzamos sobre el arroyo de Valdeasnos y tras unos metros de ascenso nos desviamos a la izquierda para tomar un sendero junto a la valla de la finca "Las Hoyas" que coincide con el límite entre las provincias de Madrid y Toledo, por el que llegamos (tras "jabalinear" un poco entre las zarzas del arroyo de las Zorreras) hasta el antiguo trazado del ferrocarril Madrid-Almorox, que cruzamos para continuar unos metros por el sendero hasta desviarnos a la derecha tomando un camino que nos llevó hasta Almorox.
En la plaza de Almorox sentados al solecito junto al Ayuntamiento hicimos la "parada barrita" de la jornada, para minutos después continuar la marcha para abandonar el pueblo con un descenso hasta el arroyo Tordillos que de nuevo "nos dejó helados".
Menos mal que íbamos a entrar pronto en calor, ya que a continuación tras pasar bajo la carretera M-544 comenzaba un ascenso de unos tres kilómetros por el antiguo camino de Cadalso de los Vidrios a Almorox y después por la Senda del Cerro Cruz que nos puso "las pilas" de nuevo.
Abandonamos posteriormente la Senda del Cerro Cruz para desviarnos a la derecha y tomar unos senderos que nos condujeron hasta el pequeño pantano de "El Romillo", donde hicimos una paradita para hacernos la fotito de grupo antes de continuar por el sendero que bordea el pantano y que nos llevó hasta la Cañada de Talavera.
Tomamos a continuación un bonito camino entre los pinos para salir de nuevo a la Cañada de Talavera y llegar hasta la carretera N-403, que cruzamos para de nuevo afrontar otra buena subidita entre los pinos por la que llegamos hasta la urbanización de El Encinar del Alberche, con rotura de cadena de Transcastro incluida.
Atravesamos después la urbanización hasta salir a la carretera M-507, a la que nos incorporamos durante unos metros para después desviarnos a la derecha para tomar un sendero en paralelo a la misma por el que bajamos hasta el arroyo Arrofresnos, afrontando después el último rampón, de cerca del 20% y donde únicamente Transcastro y Rafa subieron sobre la bici.
Afrontamos después el descenso hasta el pueblo por el senderito entre las jaras del antiguo camino de Almorox a Villa del Prado, llegando al pueblo por el polígono industrial y dirigiéndonos posteriormente hacia la Plaza Mayor, donde sentados al solecito nos tomamos (otro día mas) unas cervecitas a la salud de Noesperoanadie, que había cumplido años hacía poco y todavía lo teníamos pendiente. ¡¡Muchas felicidades!!.
Y eso fue todo en una jornada en la que únicamente hemos recorrido unos 31 kilómetros, pero con casi 800 metros de desnivel acumulado y en la que empezamos con mucho frío (por primera vez llegaron a doler los dedos), que calentamos rápido con los cuestones, y que disfrutamos de nuevo de muchos senderos y del campo en un estado espectacular.



martes, 24 de noviembre de 2015

Domingo 22 de noviembre de 2015 (Ha llegado el invierno)



Ya ha llegado el invierno y parece que para quedarse, lo que ha hecho que para la última de nuestras rutas mensuales de este año 2015 amaneciera una jornada con una buena bajada de temperaturas.
Dispuestos a disfrutar de una buena rutilla por las tierras de Navalagamella y Valdemorillo nos hemos juntado en la estación de autobuses a las 8 un buen grupito compuesto por Eltiolavara, Perejil, Noesperoanadie, Transcastro, Javichy, Granaíno, Edu y Rafa.
Tras apañar las burras en las "fregonetas" de Javi y Javichy pusimos rumbo a Aldea del Fresno para recoger a Jose, continuando posteriormente camino hasta Navalagamella, aparcando los vehículos junto a la iglesia de Nuestra Señora de la Estrella, donde se unió al grupo Alberto, un amigo de Villamanta que de nuevo compartía jornada con nosotros.
Tras los preparativos oportunos, echamos a rodar tomando unas calles de Navalagamella para dirigirnos hacia el sur, donde abandonamos el pueblo tomando un senderito muy disfrutón por el que nos incorporamos a un camino que nos condujo hasta la carretera M-510.
Cruzamos la carretera y tomamos un trozo de pista asfaltada para bordear una residencia e incorporarnos al camino de Navahonda, que tras pasar una puerta de alambres nos internó en un bonito encinar que nos llevó a enlazar con el Cordel del Puente de San Juan, desde donde se veían a cierta distancia el conjunto de antenas de la estación de seguimiento espacial de Fresnedillas.
Nos incorporamos entonces al Cordel, que "picando p'arriba" nos llevó hasta la carretera M-521 cruzando la misma para llegar a los primeros bunkers de la ruta, en la zona de "El Risquillo", donde hicimos la primera paradita de la mañana y las primeras fotitos.
Reanudamos la marcha tomando un sendero durante unos pocos metros para dirigirnos hacia otro espectacular conjunto de bunkers desde donde se dominaba todo el valle hasta Valdemorillo y donde de nuevo disfrutamos de otra paradita con las oportunas fotos.
Echamos de nuevo a rodar, poniendo rumbo norte hacia Peralejo Estación mientras un aire "helador" nos daba de frente, lo que hacía que se nos quedara la cara helada.
Tomamos el camino de Vinateros y cruzamos el arroyo de la Moraleja, continuando después entre encinas hasta salir a la carretera M-532, que cruzamos para continuar por la dehesa de la Sierra para salir más adelante de nuevo a la carretera M-532, por la que rodamos durante un kilómetro hasta enlazar con la "Colada de la Encrucijada", un sendero por el que disfrutamos un montón.
Al término de la Colada de la Encrucijada, al solecito realizamos la "parada barrita" de la jornada, enlazando después con la Colada de Fuentevieja hasta llegar a la carretera M-600, que cruzamos para continuar bordeando la urbanización Parque de las Infantas y tomar la Vereda de los Vaqueros, otro camino-sendero por el que bordeamos la urbanización El Paraíso y llegamos hasta Valdemorillo.
Bordeamos el pueblo y tomamos el camino de Robledo de Chavela, donde nos tocó hacer frente al tramo de mayor exigencia física de la jornada, con un buen cuestón que unido a que teníamos "las patas frías" nos hizo darnos un buen calentón.
Nos impresionó ver a mitad de la subida una especie de "altar improvisado" con una corona de flores con la inscripción "Te queremos Papá, tus hijos no te olvidan", ya que según nos comentó un biker con el que coincidimos, hace unos meses murió allí de un infarto un chaval practicando este deporte que tanto nos gusta. D.E.P.
Con una "sensación extraña" en el cuerpo proseguimos la marcha hasta salir a una pista asfaltada por la que rodamos unos metros hasta desviarnos a la izquierda para tomar la Cañada Real Leonesa y comenzar una divertida bajada hasta el arroyo de Los Conejeros, donde nace el río Perales y comienza la Senda de Los Molinos.
Nos incorporamos a la Senda de Los Molinos y disfrutamos de ese precioso entorno junto al río Perales, con parada obligada junto a un enorme molino para hacernos una fotito.
Aunque la Senda no es ciclable en su totalidad, (hay que hacer cuatro o cinco tramos de unos pocos metros con la bici al hombro), merece totalmente la pena recorrerla (esta sería una de las pocas veces que nadie "se quejó" de hacer "empuja-bike"). De hecho nos emplazamos a realizarla en primavera, cuando el río lleve buen caudal de agua, que debe de estar impresionante.
Tras la Senda de los Molinos, continuamos por otro bonito senderito que transcurre junto al arroyo del Molino del Hondillo, por el que serpenteando entre las encinas llegamos hasta otra "tachuela", una buena cuesta que nos llevó hasta el Mirador del Hondillo, donde disfrutamos de unas bonitas vistas de la zona además de hacernos por supuesto una fotito.
Ya en Navalagamella, nos dirigimos a visitar unos búnkeres en las afueras del pueblo, desde donde tomamos el último senderito que nos llevó hasta la Iglesia de Nuestra Señora de la Estrella, lugar desde donde habíamos comenzado la ruta.
Tras "adecentarnos" un poco y colocar las bicis en las furgonetas, nos dispusimos a "dar buena cuenta" del avituallamiento líquido y sólido, así que como hacía una buena "rasca" nos colocamos al abrigo de un autobús y entre risas y buen rollito nos pusimos "manos a la obra".
Para terminar, contábamos con "postre" especial, una caja de pastas y polvorones cortesía de nuestro amigo Alberto con lo que finalizamos la jornada con un buen "regustillo dulce". Muchas gracias por el detalle, Alberto!!!.
Y así nos marcamos para el cuerpo una preciosa rutilla de unos 42 kilómetros, sin apenas dificultad física y con unos tramos muy disfrutones de senderitos, apuntándonos para la primavera el tramo de la Senda de Los Molinos. La parte "negativa" es que hemos pasado bastante frío, será que el cuerpo no se nos ha "aclimatado"...........