miércoles, 29 de mayo de 2019

Domingo 26 de mayo de 2019 (Último entrenamiento antes del gran reto del año)


Última jornada de preparación de la “Segovia-Villa del Prado”, y con el objetivo de superar los 100 kilómetros, nos hemos juntado en esta ocasión en la Plaza Mayor a las 8,00 horas un quinteto compuesto por Eltiolavara, Transcastro, Horacio, Alberto y Rafa.
Pasados cinco minutos de las ocho, y como no contábamos con que viniera nadie más, echamos a rodar al igual que el domingo anterior abandonando la Plaza Mayor con dirección sur para dirigirnos hacia el antiguo trazado del ferrocarril Madrid-Almorox.
Por el trazado del ferrocarril recorrimos los tres kilómetros hasta enlazar con la pista asfaltada que va hacia la ermita de La Poveda, a la que nos incorporamos para dirigirnos hacia la ermita, la cual dejamos a nuestra izquierda para continuar por el “Camino de La Poveda” hacia la carretera M-507.
Al llegar a la carretera M-507, nos incorporamos a la misma hasta llegar al puente de "La Pedrera" sobre el río Alberche, donde tomamos un camino en paralelo al río con dirección sur para más adelante girar a la izquierda hasta llegar a la carretera M-510, a la que nos incorporamos durante unos metros hasta girar a la derecha para como el domingo pasado volver a subir “el cuestón” del 20% de inclinación que nos llevó hasta la zona de “Suertes Viejas”, desde donde nos dirigimos hacia el camino de Navayuncosa.
Por el camino de Navayuncosa pusimos rumbo hacia Villamanta rodando a buen ritmo hasta llegar a la carretera M-530, que tomamos durante unos metros hasta desviarnos a la derecha para descender hasta el pueblo, pasando junto a la antigua estación del tren y bordeando el mismo hasta enlazar con el camino de Valdeyeso, que recorrimos durante unos siete kilómetros “picando p’arriba” hasta llegar a la carretera A-5.
Bordeamos la urbanización de Calypo-Fado por un camino “sube-baja” y nos incorporamos a la vía de servicio que transcurre junto a la autovía A-5, por la que en paralelo a la misma y con tramos de firme diverso recorrimos los 35 kilómetros que nos separaban de la localidad de Maqueda, donde en un parque junto al castillo nos hicimos la “fotito de grupo” y repusimos “líquido elemento” para lo que nos quedaba de regreso al pueblo.
Y al reanudar la marcha después de la parada apareció un “nuevo invitado”, que era el “viento de cara” que ya no nos iba a abandonar hasta regresar al pueblo, haciéndonos nuestra “ruta de entrenamiento” algo más dura de lo esperado.
Por la “Vereda del Val de Santo Domingo a Escalona” pusimos rumbo hacia éste último pueblo, con el viento en contra, teniendo que cruzar el Arroyo de Prada que……….¡¡¡Casi nos llegaba hasta los “pelendengues”!!! (joder con el agua que llevaba el arroyo………).
Con las piernas y los pies bien “refrescaditos”, continuamos por el “Camino de Maqueda a Escalona” y llegamos hasta las urbanizaciones junto a la ribera del Alberche, incorporándonos después a la carretera N-403 para cruzar el río por el puente y bordear a continuación el pueblo por el paseo que hay a la orilla del río haciendo allí una última paradita de avituallamiento.
Reanudamos la marcha y tomamos un camino entre las encinas por el que haciendo frente algún repecho durillo por la piedra suelta llegamos hasta la urbanización de Almorojuelo, que bordeamos por su parte sur hasta incorporarnos al antiguo camino (ahora asfaltado) de Escalona a Villa del Prado, llegando a continuación a la urbanización de Valcarrillo-Campuzano.
Ya justos de fuerzas, proseguimos desde allí por el camino vecinal de Escalona y Almorox a Villa del Prado hasta llegar a la carretera M-540, por la que rodamos alrededor de un kilómetro y medio desviándonos después a la izquierda para tras un tramo de enlace incorporarnos al antiguo trazado del ferrocarril Madrid-Almorox, por el que realizamos los últimos kilómetros hasta regresar al pueblo pasadas las dos de la tarde.
Hemos cumplido con nuestro objetivo de la jornada recorriendo nada menos que 109 kilómetros, que sin duda nos han servido de buen entrenamiento para lo que “se nos avecina” el domingo que viene y que seguro que disfrutaremos.
Ya está aquí la “Segovia-Villa del Prado”!!!!!!.

jueves, 23 de mayo de 2019

Domingo 19 de mayo de 2019 (Seguimos aumentando kilometraje)


Dispuestos a seguir preparando nuestro rutón del año “Segovia-Villa del Prado” del próximo 2 de junio, para la jornada de hoy continuamos con el horario adelantado a nuestra hora habitual, y a las 8,00 horas nos hemos juntado para darle al pedal en la Plaza Mayor un buen grupo compuesto por Eltiolavara, Jorge, Horacio, Transcastro, Nacho y Rafa por parte del Club, además de dos “Pablos”, Pablo “el sobrino de Senderitos) y Pablo González, que hacía mucho tiempo que no nos acompañaba.
Con un recorrido preparado por Jorge en el que llegaríamos hasta Casarrubios y El Álamo, echamos a rodar pasados unos minutos de las 8,00 horas abandonando la Plaza Mayor con dirección sur para dirigirnos hacia el antiguo trazado del ferrocarril Madrid-Almorox.
Rodando a buen ritmo por el trazado del ferrocarril fuimos calentando las piernas hasta llegar a la pista asfaltada que va hacia la ermita de La Poveda, a la que nos incorporamos para dirigirnos hacia la ermita, donde al llegar tuvimos que hacer una parada para arreglar un pinchazo en la rueda trasera de Senderitos, continuando después la ruta por el “Camino de La Poveda” hacia la carretera M-507.
Al llegar a la carretera M-507, nos incorporamos a la misma hasta llegar al puente de "La Pedrera" sobre el río Alberche, donde tomamos un camino en paralelo al río con dirección sur para más adelante girar a la izquierda hasta llegar a la carretera M-510, a la que nos incorporamos durante unos metros hasta girar a la derecha para tomar un caminito que al principio asciende suavemente pero que después se convierte en “un cuestón” que llega hasta el 20% de inclinación y que nos puso a tope “la caldera”.
Tras subir el cuestón llegamos a la zona de “Suertes Viejas”, desde donde nos dirigimos hacia el camino de Navayuncosa, donde tuvimos la sorpresa de encontrarnos con nuestro amigo y antiguo miembro del Club Manolo Beades, que había salido a hacerse una ruta en solitario y que se animó a recorrer con nosotros unos kilómetros.
Por el camino de Navayuncosa pusimos rumbo hacia Villamanta con un ritmo considerable hasta llegar a la carretera M-530, la cual atravesamos para continuar por el Camino Alto con dirección hacia Valmojado, donde a la entrada del pueblo nos hicimos una fotito de grupo y donde a pesar de que Manolo tenía previsto hacerse otra ruta, conseguimos convencerle para que continuara con nosotros, ya que teníamos que pasar por Aldea para regresar al pueblo.
Tras la fotito y “parada barrita”, reanudamos la marcha atravesando el pueblo de Valmojado y comenzando a recorrer una zona por la que hasta la fecha no habíamos transitado, tomando un camino en paralelo a la carretera CM-4004 por el que tras recorrer unos cuatro kilómetros llegamos rápidamente a Casarrubios del Monte, siendo la primera ocasión que visitábamos esta localidad en nuestras salidas dominicales.
Atravesamos Casarrubios y tras hacer una parada en una fuente para reponer “líquido elemento”, continuamos la ruta incorporándonos al “Cordel de Hormigos” para tras recorrer unos seis kilómetros llegar a la localidad de El Álamo.
Atravesamos también El Álamo y nos incorporamos al “Carril de Manzolo”, por el que llegamos hasta la R-5 y a continuación la A-5 para después tomar el camino de Valdeyeso y a un gran ritmo dirigirnos hacia Villamanta, donde bordeamos el pueblo para enlazar con la Cañada Real Segoviana y recorrer por ella los aproximadamente cinco kilómetros que nos separaban de Villanueva de Perales.
Tras una breve paradita en Villanueva de Perales para reponer agua, continuamos la marcha hacia Villamantilla, desde donde nos incorporamos al Camino del Río para descender hasta el río Perales y enlazar posteriormente con el camino de Chapinería.
Rodamos por el camino de Chapinería con dirección hacia ésta localidad, aunque más adelante abandonamos el camino para dirigirnos hacia el sendero que por la zona de “Las Esperillas” asciende hasta las cercanías de la Cañada Segoviana, a la que nos incorporamos para descender hasta Aldea del Fresno.
Tras despedirnos de nuestro amigo Manolo (que salía a hacerse una rutilla tranquilo y terminó haciéndose 75 kilómetros en nuestra compañía) bordeamos a continuación Aldea del Fresno por el camino que transcurre junto al río hasta llegar al puente de “La Pedrera”, donde nos incorporamos a la carretera M-507 para recorrer los casi tres kilómetros necesarios para enlazar con el camino de La Poveda e incorporarnos al mismo para rodar con dirección a la ermita en dirección opuesta a la que habíamos comenzado la ruta, dejando la ermita a nuestra derecha y continuando por la pista asfaltada para posteriormente enlazar con el antiguo trazado del ferrocarril Madrid-Almorox y realizar los kilómetros finales de la ruta hasta regresar al pueblo.
Al final nos ha salido una estupenda ruta de unos 96 kilómetros, en la que hemos vuelto a sacar una media de casi 20 Km/h, y en la que ha sido una lástima el pinchazo de Senderitos a primera hora que nos ha evitado de haber llegado a los “tres dígitos” en la ruta de hoy, pero hemos terminado muy contentos y con buenas sensaciones en nuestra preparación.
Y para el próximo domingo……..a pasar de los 100 Km!!!!.

jueves, 16 de mayo de 2019

Domingo 12 de mayo de 2019 (Primera "tiradita larga")


Para la jornada de hoy había prevista una ruta con una buena ración de kilómetros de “rodaje” visitando las localidades toledanas de Santa Cruz de Retamar y Quismondo, las cuales no visitábamos desde el año 2016.
En esta ocasión y al igual que los futuros domingos de este mes de mayo, hemos adelantado la salida a las 8,00 horas, para así poder realizar más kilómetros sin necesidad de estar de vuelta en el pueblo demasiado tarde, y en la Plaza Mayor a esa hora nos hemos dado cita un “sexteto” compuesto por Transcastro, Eltiolavara, Horacio, Senderitos, Nacho y Rafa.
Como sabíamos que no se iba a presentar nadie más, echamos a rodar abandonando la Plaza Mayor con rumbo sureste para dirigirnos hacia el antiguo trazado del ferrocarril Madrid-Almorox, por el que llegamos hasta la pista asfaltada que enlaza la carretera M-507 con la ermita de La Poveda para incorporarnos a la misma con dirección hacia la ermita.
Pasamos junto a la ermita y nos incorporamos al camino de La Poveda hasta llegar a la carretera M-507, incorporándonos a la misma para recorrer los aproximadamente tres kilómetros hasta llegar al “puente de La Pedrera” donde nos incorporamos a la Senda de la Dehesa, por la que a la sombrita y en paralelo al río continuamos con nuestro rodar hasta llegar a la antigua estación del tren de “Río Alberche”, donde giramos a la izquierda para dirigirnos hacia un antiguo secadero de tabaco y pasando junto a una antigua gravera llegar hasta la carretera M-510.
Tomamos durante unos metros la carretera M-510 hasta desviarnos a la derecha por la carretera que se dirige hacia la urbanización Calalberche, abandonando la misma tras unos pocos metros para comenzar a ascender bordeando una antigua gravera hasta enlazar con el camino de Méntrida a Aldea del Fresno, por el que llegamos hasta la urbanización “Las Moreras”.
Atravesamos la urbanización y nos incorporamos al “Camino de la Morera Tirante” (curioso nombre), que al parecer algún “terrateniente” ha debido de comprar los terrenos junto al mismo y “con un par……” ha vallado el camino, lo que nos obligó a dar un pequeño rodeo para poder evitar la valla y continuar hasta Méntrida.
Atravesamos el pueblo e hicimos frente al cuestón del 16% de inclinación que nos condujo hasta la entrada de la urbanización “El Avión”, donde tomamos el camino de Madereros para continuar por una zona de “sube-baja” que nos llevó a incorporarnos posteriormente al camino del Molino, por el que continuamos hasta llegar a La Torre de Esteban Hambrán.
Atravesamos el pueblo y tras unos metros por la carretera CM-5004 enlazamos con el camino de Valdehornos, incorporándonos después a otro camino que nos condujo hasta la autovía de Extremadura, pasando por debajo de la misma para llegar al tercer pueblo de la ruta, Santa Cruz de Retamar, donde en un parque aprovechamos para realizar la “parada barrita” y hacernos una fotito graciosa del grupo subidos en un autobús para niños que allí había.
Continuamos la marcha bordeando el pueblo y nos incorporamos al camino de Quismondo, por el que a buen ritmo al disponer de terreno “de perfil favorable” y atravesando un buen “secarral” llegamos en unos minutos a Quismondo, donde hicimos una breve parada para coger algo de agua y proseguimos la marcha pasando por un puente sobre la autovía de Extremadura para incorporarnos al camino de Escalona a Quismondo y rodar a buen ritmo hasta llegar a la zona de las Colonias de la Ribera del Alberche
Pasamos por el puente sobre el río Alberche y ascendimos hasta Escalona, para tras recorrer algunas calles descender para pasar sobre la carretera N-403 por un puente e incorporarnos a un camino entre las encinas por el que haciendo frente algún repecho durillo por la piedra suelta nos llevó hasta la urbanización de Almorojuelo, que bordeamos por su parte sur hasta incorporarnos al antiguo camino (ahora asfaltado) de Escalona a Villa del Prado, llegando a continuación a la urbanización de Valcarrillo-Campuzano.
Proseguimos desde allí por el camino vecinal de Escalona y Almorox a Villa del Prado hasta llegar a la carretera M-540, por la que rodamos alrededor de un kilómetro y medio desviándonos después a la izquierda para tras un tramo de enlace incorporarnos al antiguo trazado del ferrocarril Madrid-Almorox, por el que realizamos los últimos kilómetros de la ruta.
Y de esta manera hemos realizado la ruta prevista, recorriendo 82 kilómetros y además estando pronto de vuelta, antes de la una, con lo que tuvimos tiempo de tomarnos una cervecita en la Plaza Mayor (bien merecida después de la kilometrada que nos habíamos pegado).
Para el próximo domingo…….otra más larga todavía.