En el último domingo antes de las fiestas patronales, nos hemos reunido en la Plaza Mayor a las nueve un grupito compuesto por Eltiolavara, Horacio, Gabri, Alberto, David y Rafa, además de César y Nacho que llegaron con un poco de retraso al “extraviarse” Nacho mientras bajaban hasta el pueblo desde El Encinar del Alberche.
Una vez llegaron “los perdidos” comenzamos la ruta
abandonando el pueblo por el Polígono Industrial para tomar el Camino de
Almorox y ascender hacia El Encinar del Alberche entrando pronto en calor con
alguna rampa del 20%, aunque aprovechamos un pinchazo de César para tomar aire
durante la subida.
Tras solventar el problema, reanudamos de nuevo la
marcha y llegamos hasta El Encinar del Alberche, bordeando la urbanización por
su parte sur hasta llegar a la pista que se dirige hacia la urbanización de
Pinar de Almorox.
Atravesamos la urbanización y posteriormente la
carretera N-403 para tomar unos caminos (con otro pinchazo de César incluido) por
los que llegamos hasta la parte de atrás de la urbanización El Romillo, pasando
por el muro del pequeño embalse de Tordillos para dirigirnos hacia la Cañada de
Talavera, por la que rodamos unos tres kilómetros hasta desviarnos a la
izquierda para poner rumbo hacia Almorox, dándonos entonces cuenta de que
habíamos perdido a Nacho.
Aprovechamos para hacer la “parada barrita” sobre unas
enormes rocas mientras Eltiolavara volvía de ir a la búsqueda de Nacho y nos
hicimos igualmente la fotito de grupo para posteriormente reanudar la marcha
por diversos caminos con dirección hacia el puente de Las Barguillas, donde al
llegar, en esta ocasión David y César se extraviaron tomando otro sendero
distinto del resto.
Al llegar al camino de Los Enebrales, nos pusimos en
contacto con ellos y quedamos en encontrarnos en el cementerio de Almorox,
donde una vez que llegamos tuvimos que llamarles de nuevo porque continuaban
extraviados.
Al final nos encontramos en la gasolinera abandonada
de Almorox, desde donde tomamos un camino paralelo a la carretera N-403 hasta
la urbanización de Pinar de Almorox para desde allí ascender hasta El Encinar
del Alberche, atravesando la urbanización para dirigirnos hacia la cafetería,
donde Nachete había prometido invitar a unas cervecitas.
Como no podíamos dejar pasar la invitación, nos
tomamos una cervecita y reanudamos la marcha para poner rumbo de regreso al
pueblo, tomando en esta ocasión y aunque no sea “Santo de nuestra devoción” la
carretera M-507, por la que descendimos rápidamente hasta el pueblo tras
realizar una bonita ruta de unos 36 kilómetros con algunas incidencias en forma
de pinchazos y extravíos.
Para el domingo que viene se esperan muchas bajas al
estar la mayoría del personal “convaleciente” por las fiestas del pueblo,
aunque algunos nos desplazaremos hasta El Álamo para participar allí en una
marcha benéfica.
¡¡Felices fiestas patronales 2022!!
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