Con el pueblo cubierto por la niebla, hoy nos hemos reunido en la Plaza Mayor a nuestra hora habitual un buen grupito compuesto por Eltiolavara, Alberto Fernández, Alberto García, David, Nacho, César, Horacio, Rafa y Adrián.
Como hacía bastante tiempo que no íbamos por allí,
decidimos encaminarnos hacia la zona de Entrepinos para disfrutar de los
senderos, por lo que abandonamos el pueblo por el antiguo camino de Villa del
Prado a San Martín de Valdeiglesias, por el que llegamos hasta la Cañada de
Talavera.
Nos incorporamos a la Cañada de Talavera y ascendimos
por la cuesta asfaltada para continuar después por la Cañada hasta desviarnos a
la derecha y descender hasta la carretera N-403 junto al Pozo Alcornocoso,
donde tras cruzar la carretera continuamos rodando entre los pinos para
posteriormente cruzar el arroyo Tordillos y emprender a continuación el ascenso
hacia las canteras de Cadalso de los Vidrios por la zona de Valdelavieja.
Continuamos con dirección a Cadalso para después
bordear el pueblo por unos divertidos senderos y descender a continuación por
otro sendero junto a la carretera M-542 para tras cruzar la misma rodar en
paralelo al arroyo Tórtolas hasta afrontar el “subidón” de la jornada por la
trialera que sube hasta la urbanización de Entrepinos, con algún tramo del 18%
de inclinación.
Bordeamos la urbanización y de nuevo tocaba otro tramo
de diversión por los senderitos que transcurren por la zona de “La Culebra” y que
nos condujeron de nuevo junto a la carretera M-542, la cual atravesamos para
dirigirnos hacia la vía pecuaria de “El Boquerón”, por la que ascendimos para
posteriormente tomar durante unos metros la carretera N-403 e incorporarnos a
la Cañada de Talavera.
Tras unos metros por la Cañada de Talavera, nos
incorporamos al camino de San Martín de Valdeiglesias a Villa del Prado, por el
que realizamos un rápido y divertido descenso para regresar al pueblo tras
realizar una bonita ruta de unos 42 kilómetros.
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