Parte 1 de la jornada (la ruta en bici)
Llegó el día previsto para el
"bike-cocido" y mientras Javichy y Loren se disponían a ir preparando
el banquete en "Villa-Loren", en la plaza a las nueve nos hemos
juntado Eltiolavara, Perejil, Jose "el Mara", Transcastro,
Noesperoanadie, Pedro "Kubala", Manolo Beades y Rafa por el Club,
uniéndose al grupo Horacio y Paco "el Máquina".
Después de mucho tiempo, esta vez
no íbamos a empezar una ruta "tirando parriba", así que pusimos rumbo
hacia el sur saliendo del pueblo por un
camino que nos llevó a enlazar con el antiguo trazado del ferrocarril
Madrid-Almorox, donde algunos parecía que tenían prisa, porque salieron como
cohetes. El resto nos lo tomamos con más tranquilidad y rodando más tranquilos llegamos
hasta la finca "La Blanca", donde nos reagrupamos todos.
Continuamos la marcha girando a
nuestra izquierda para tras un trozo de camino incorporarnos a la carretera
M-540 hasta enlazar con el camino vecinal de Escalona y Almorox a Villa del
Prado, donde tras mojarnos un poco los pies al cruzar el arroyo Valdeasnos
continuamos la marcha a buen ritmo hasta llegar a la urbanización de
Valcarrillo, continuando después hasta llegar a la urbanización de Almorojuelo.
Bordeando la urbanización de Almorojuelo
tomamos un bonito sendero que va junto al río Alberche para llegar hasta las
cercanías de Escalona, haciendo una parada obligatoria antes debido a que
Noesperoanadie rompió la cadena de la burra. Bordeamos el pueblo por su parte
sur por el paseo que hay al pie del castillo y junto a la orilla del río hasta
llegar a la "cuestecilla" de menos de cien metros que tiene casi un
40%, donde más de la mitad del grupo puso pie a tierra. Después de "la
subidita" cruzamos la muralla para dirigirnos hacia la plaza del pueblo,
donde al solecito hicimos la "parada barrita" de la jornada.
Después de reponer fuerzas, continuamos
la ruta dirigiéndonos hacia Paredes de Escalona por la pista que hay paralela a
la carretera, saliendo a la misma durante un par de kilómetros y volviendo
después a incorporarnos a un camino a nuestra izquierda por el que llegamos
hasta Paredes de Escalona.
Atravesamos el pueblo y rodamos
unos metros por la carretera TO-9321 para desviarnos después a la izquierda
hacia la cantera del "Diente de la Vieja", desde donde recorrimos la
bonita zona de senderos que pasando sobre el "puente de piedras" sobre
el arroyo Cantarranas y nos llevó a salir al camino de los Enebrales, por que
el llegamos a Almorox.
Atravesamos Almorox saliendo del
pueblo por la "calle Villa del Prado" para dirigirnos hacia la
urbanización de Pinar de Almorox por el camino del charco de Cahorzo, pasando junto
a las granjas que hay a la salida del pueblo, para después desviarnos por otro
camino a la izquierda y continuar subiendo hasta llegar al depósito del agua de
la urbanización.
Bajamos después hasta la pista
que comunica la urbanización de Pinar de Almorox con El Encinar del Alberche,
por la que rodamos hasta llegar a ésta última, tomando un par de calles para
dirigirnos hacia el camino del Majanal, dándole en la última cuesta un tirón a
Manolo en una pierna.
Tras una parada de
reagrupamiento, listos para afrontar la última parte de la ruta y pensando en
el cocido, rodamos durante unos metros por el camino del Majanal, desviándonos
todos menos Manolo y Paco por un sendero a la derecha que nos llevó a pasar por
un par de lagunas, donde hubo que hacer otra parada obligatoria para arreglar
un pinchazo de Horacio para después continuar la marcha y salir al camino del
Valle, por el que regresamos al pueblo.
Parte 2 de la jornada (El
Cocidito)
Después de irnos cada uno a su
casa para "adecentarnos", escalonadamente fuimos reuniéndonos en
"Villa-Loren", donde Javichy tenía el cocidito preparado, y mientras
nos tomábamos un aperitivo y una cervecita esperando a que llegaran todos los
comensales.
Y una vez que llegó Antonio
Granaíno, que venía desde su tierra, nos pusimos "manos a la obra"
con la desgustación, disfrutando todos de ese cocidito rico que nos supo a
todos de P. MADRE.
Nuestro agradecimiento al
"Master-chef" Javichy, por el riquísimo cocido que nos preparó, y al
anfitrión Loren por hacernos sentir "como en casa", al que tomaremos
la palabra en un futuro para repetir con otra jornada gastronómica similar en
la que disfrutar de la comida y el buen ambiente.
Lo dicho, una jornada completa y que
sin duda habrá que repetir en el futuro.
¡¡MUCHAS GRACIAS!!
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