Mucho tiempo llevábamos esperando que nevara en el
pueblo o sus cercanías para hacer una rutilla sobre la nieve, y por fin llegó
el día, y además con bastante más nieve de la esperada.
Algunos, muy a su pesar, no pudieron venir desde fuera
del pueblo para incorporarse al grupo, así que únicamente nos reunimos en la
Plaza Mayor un trío compuesto por Eltiolavara, Transcastro y Rafa, a los que se
nos unió nuestro amigo Pablo, que tampoco estaba dispuesto a dejar pasar una
ocasión como esta de disfrutar de la nieve.
Arrancamos la ruta abandonando el pueblo por el antiguo
camino de Villa del Prado a Pelayos de la Presa, siguiendo desde el principio
unas rodadas de un “todo terreno” por las que al estar la nieve “pisada” se
podía rodar sin problema siendo imposible salirse de las rodadas al haber más
de una cuarta de nieve.
Con algún pequeño tramo que costaba más debido a que
la nieve se había helado y las ruedas patinaban, ascendimos disfrutando de un
paisaje espectacular que no habíamos tenido la ocasión de disfrutar
anteriormente y descendimos hasta la Cañada de Talavera, contemplando como la
laguna que forma el arroyo del Jaralón estaba congelada.
Nos incorporamos a la Cañada de Talavera con dirección
hacia el cerro Valdenoches, pero llegó un momento en el que el “todo terreno”
había decidido darse la vuelta y nos resultó imposible continuar, teniendo que rehacer
todo lo recorrido anteriormente para regresar al pueblo por donde habíamos
comenzado la ruta.
Aunque la ruta ha sido cortita, de únicamente unos 23
kilómetros, nos ha llevado bastante tiempo debido a la “dificultad técnica” de
rodar por la nieve, pero hemos disfrutado como niños y siempre recordaremos la inolvidable
ruta que hemos realizado.
Ojalá podamos repetir algo parecido en el futuro…….
No hay comentarios:
Publicar un comentario